Antes de entrar de lleno en la definición de los perfiles de color, es necesario distinguir algunos conceptos claves en Teoría del Color que funcionan como conceptos previos para su adecuada comprensión.
Existe el concepto de Corrección del Color. Este es un tema en realidad subjetivo. Una fotografía de una puesta de sol puede tener una tonalidad anaranjada que una persona puede percibir como excesiva y a otra le enamore. La primera tratará de eliminarla con las herramientas a su disposición. La segunda la mantendrá: Para una, la tonalidad será correcta y para la otra no. Aquí no intervienen para nada los perfiles de color.
Cuestión diferente es el tema de la Administración del Color. Esta trata de que los colores que se observan en el monitor sean "exactamente" los mismos que se obtendrán en la copia impresa (en realidad, exactamente del todo, es imposible, pues una tecnología es emitiva y la otra reflexiva). Se pueden utilizar también perfiles de otros dispositivos, tales como los Escanneres.
Aquí entran de lleno los perfiles de color, conocidos como perfiles ICC debido a la institución en la que fueron desarrollados. Estos perfiles son unos ficheros informáticos, independientes de Sistema Operativo, que contienen unas tablas de conversión en dos sentidos. Y trabajan con espacios de color RGB. Convierten los números del espacio de color de ese dispositivo concreto en una representación en el espacio (y modelo) de color Lab. Y viceversa. El espacio (y modelo) de color Lab funciona pues como un mecanismo de traducción intermedia entre dispositivos.
En realidad la cuestión anterior debe ser matizada en dos aspectos.
a) Existen perfiles de color genéricos para una modelo de dispositivo, por ejemplo todas las impresoras Epson R800 con papel premium glossy, aunque una unidad particular puede mostrar ligeras diferencias con este perfil. En la práctica la mayoría de los fotógrafos aficionados usamos estos perfiles genéricos.
b) También se contempla la traducción con espacios de color no ligados a un dispositivo. Cuando una fotografía es abierta en un editor gráfico, su representación se hace en el espacio de color Adobe RGB, sRGB u otros. Es necesario un perfil que realice una adecuada representación en el monitor que estamos utilizando.
En relación con la corrección del color, una adecuada administración del color, hará que una fotografía con una tonalidad magenta en el monitor se imprima con ese mismo tono magenta en la impresora.
Un aspecto diferente hace referencia a la calibración de un dispositivo. En este caso nos estamos refiriendo al hecho de que el espacio de color de ese dispositivo puede cambiar con el tiempo. El caso más obvio es el de los monitores. Si usamos un colorímetro y el software adecuado, podemos generar un perfil exacto del dispositivo concreto. Si la representación de colores de ese dispositivo cambia con el tiempo -es decir, cambia su espacio de color- es necesario calibrar el dispositivo para obtener un perfil que sea adecuado a las nuevas circunstancias.